miércoles, 12 de marzo de 2014

IDEALISTIC

DECISIÓN. Determinación o resolución que se toma sobre una determinada cosa. Supone un comienzo o un fin de una situación. Implica cambio de estado.


amsterdam 2013
Hay veces, en la vida, que tomar decisiones no es una opción, sino que pasa a ser una condición necesaria para seguir adelante.

 Sé, que decir "seguir adelante" puede sonar un poco dramático, pero con ello me refiero, a que la intranquilidad que le causa a uno el no haber solucionado ciertas cosas o tenerlas en "stand by" por miedo a las consecuencias que puedan acarrear, puede que sea unas de las peores sensaciones de ansiedad que el ser humano es capaz de mantener de forma prolongada, autoconvenciéndose de que no existe otro estado u opción posible.

Pero no nos engañemos, sí que existe esa opción, es más, la tenemos ahí, rozándonos la espalda, esperando a que nos giremos y decidamos tomar esta a-priori difícil DECISIÓN. Y digo "difícil" porque los dos millones  de "posibles consecuencias", que bombardean nuestra cabeza en el periodo de tiempo en que damos vueltas una y otra vez a si deberíamos-o-no-deberíamos tomar esta decisión, hacen que pase a serlo.

Esto, a su vez provoca un problema, problema que aparece por el miedo a experimentar sufrimiento, ya que la posibilidad de cambio es una amenaza a la comodidad de lo que a uno le resulta familiar. Pero cuando uno empieza a tomar decisiones, descubre que esos dos millones de posibles consecuencias no ocurren, que la vida es mucho más sencilla cuando intentamos cambiar aquellas cosas que no queremos, que el esfuerzo de dar el paso hacia algo se recompensa con la tranquilidad y satisfacción de haberlo hecho, de habernos sido sinceros a nosotros mismos, de haber(nos) reconocido, que la vida es una decisión contínua que depende únicamente de cada persona.

PORQUE-SOMOS-LIBRES, y aunque decimos pelear por ello, nos agobia tanto serlo que nos atamos a cosas/lugares/personas por miedo a ejercer este derecho de libertad.